ICE para cigarrillos, alcohol, cervezas, bebidas azucaradas y fundas plásticas sube entre $ 0,01 y $ 0,48 al aplicar ajuste anual. Empresariado critica alza y pide revisión

El impuesto a los Consumos Especiales (ICE) ha tomado protagonismo en el inicio del 2023. Su modificación por parte del Servicio de Rentas Internas (SRI), que estableció nuevas tarifas específicas señaladas en el artículo 82 de la Ley de Régimen Tributario Interno, provocó la reacción del sector empresarial.

Esto, porque el SRI emitió el 27 de diciembre pasado la Resolución NAC-DGERCGC22-00000063 que establece las tarifas especiales del ICE para seis productos, que entró en vigencia el 1 de enero del 2023.

Esta es la lista de productos, sus tarifas específicas del ICE y el incremento respecto a las anteriores:

1. Cigarrillos: $ 0,17 por unidad (incremento de $ 0,01 por unidad).
2. Alcohol (uso distinto a bebidas alcohólicas y farmacéuticos) y bebidas alcohólicas: $ 10,36 por litro de alcohol puro (incremento de $ 0,36 por litro de alcohol puro).
3. Cerveza industrial: $ 13,56 por litro de alcohol puro (incremento de $ 0,48 por litro de alcohol puro).
4. Cerveza artesanal: $ 1,55 por litro de alcohol puro (incremento de $ 0,05 por litro de alcohol puro).
5. Bebidas no alcohólicas y gaseosas con contenido de azúcar mayor a 25 gramos por litro de bebida: $ 0,19 por 100 gramos de azúcar añadida (incremento de $ 0,01 por 100 gramos de azúcar añadida).
6. Fundas plásticas: $ 0,10 por funda plástica.

En el caso de las fundas plásticas, la resolución aclara que el impuesto se establece en conformidad con la Disposición Transitoria Sexta de la Ley Orgánica de Simplificación y Progresividad Tributaria.

Estos cambios, según la resolución, se basaron en la información publicada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) en su página web institucional, acerca de la variación anual del Índice de Precios al Consumidor (IPC General), a noviembre de 2022, que fue de (+) 3,64420736328825 %.

En Ecuador por este impuesto, que incluye otros productos y servicios adicionales a los que se les aumentó la tarifa específica, de enero a julio del 2021, se recaudaron $ 482 millones, lo que representó una variación del 2,0 % en relación con el mismo periodo del año 2021. El ICE de operaciones internas decreció (pasó de $ 350 millones a $ 297 millones), mientras que el de operaciones externas subió de $ 122 millones a $ 184 millones. En julio de 2022 se recaudaron $ 60 millones por concepto de este impuesto.

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Mientras, para el sector empresarial, este impuesto incrementará automáticamente el valor de productos como bebidas gaseosas azucaradas, cervezas industriales o artesanales, fundas plásticas y cigarrillos; y afectará directamente no solo a consumidores, sino también a los microempresarios y dueños de las tiendas de barrio, de las cuales dependen más de 640.000 familias.

Miguel Ángel González, presidente del Comité Empresarial Ecuatoriano (CEE), remitió un oficio al presidente de la República, Guillermo Lasso, en el que exponen la posición del empresariado y piden la revisión de las tarifas y las fórmulas para su cálculo.

“Solicitamos una revisión exhaustiva de todas las circunstancias concernientes al impuesto a los consumos especiales, de tal manera que se readecuen las fórmulas previstas y se eviten aumentos innecesarios, o incluso materializando, a mediano plazo, el objetivo máximo que es la pronta disminución o eliminación de los bienes gravados con este tributo, protegiendo así la frágil economía de los ecuatorianos”, sostuvo González en la misiva remitida al primer mandatario.

El presidente del Comité lamentó que durante gobiernos pasados se satanizó injustificadamente la venta y consumo de determinados productos, afectándolos con el ICE como un mecanismo de desincentivo y aplicando fórmulas de cálculo cuestionables y fiscalistas, sin considerar consecuencias directas como el contrabando y la evasión fiscal.

González destacó que la presión fiscal que enfrentan múltiples sectores de la economía sigue siendo un obstáculo para alcanzar la competitividad del sector productivo.

“Si bien muchos de los elementos relacionados con estos aspectos no dependen únicamente de usted y del Poder Ejecutivo, sí existen casos particulares en que la solución puede desarrollarse a través de decisiones presidenciales. Este es el caso del impuesto a los consumos especiales, que tal como en el caso de los bienes antes mencionados, contempla fórmulas y bases de cálculo que parecerían estar encaminadas simplemente a incrementar la recaudación”, explicó González al presidente Lasso. (I)